El futbolista no quiere que sus veinte años defendiendo la camiseta del Barcelona y todos sus estratosféricos registros queden empañados tras su decisión de marcharse del club azulgrana. Messi siempre ha salido a la palestra cuando se ha sentido atacado o cuando ha querido dejar alguna cuestión clara y ahora está ante la decisión más importante de su vida. Messi siente que el club no le acompaña con un proyecto deportivo para aspirar al más alto nivel y ese es el argumento principal para romper su zona de confort y buscar acomodo en otro club que le ofrezca la posibilidad de conseguir esa «copa tan linda y deseada» que se le resiste desde que la levantara por última vez hace un lustro.